La fe ha dado luz a mi alma.
Los pensamientos que Él a puesto en mí,
han obrado valiosos testimonios, en mi alma y cuerpo.
Hablando con Dios espiritualmente, día a día,
a dado paz y gozo a mi corazón.
Ahora todo unido en lo más profundo de mi ser,
se ha convertido en sencillos mensajes de primavera,
que como palomas mensajeras vuelan por el espacio
buscando nobles corazones donde anidar, crecer y multiplicarse.
En estas palabras, se resume los titulos de mis cuatro libros.
Hoy 9 de Septiembre de 2008, hace 6 años que mi cuerpo
vive el más valioso testimonio, la curación del dolor que padecia.
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